14 Nov 2018
Después de siete años de intenso desarrollo, esta nueva tecnología está abriendo oportunidades para que los clientes solucionen sus necesidades de aire acondicionado, a la vez que cumplen sus objetivos de seguridad, sostenibilidad, economía y fiabilidad.
¿Qué tienen en común las pizzas congeladas, un complejo deportivo de esquí en Dubái y un aeropuerto o un hospital en verano? Todos ellos necesitan mantenerse frescos. Sin duda damos por hecho estas comodidades, aunque existe una gran presión por incrementar la sostenibilidad y la eficiencia de las tecnologías de refrigeración y enfriamiento de las que dependemos actualmente.
El refrigerante es un componente crítico de cualquier sistema de refrigeración. En el pasado, la solución más frecuente eran los hidrofluorocarburos (HFC); sin embargo, ahora están siendo reemplazados por refrigerantes naturales, como el amoníaco, un compuesto inorgánico incoloro formado de nitrógeno e hidrógeno que puede existir como líquido o como gas. Mientras se produce esta transición a los “NatRefs”, muchos productores y, por lo tanto, sus clientes, siguen dependiendo de los HFC para sus sistemas de climatización, bombas de calor y refrigeradores, lo que tienen un gran impacto en el sector comercial, industrial y residencial. De manera similar, el coste de los HFC se está incrementando; por ejemplo, en Europa, debido a la reducción de cuotas para HFC conforme al nuevo reglamento europeo sobre gases fluorados.
El inteligente diseño 3 en 1 del GEA CompaX, creado con la tecnología de los compresores Serie GEA Grasso M, incorpora un motor eléctrico enfriado por aspiración de gas y un separador de aceite en un diseño compacto sin tuberías externas. El extraordinario nivel de eficiencia de este compresor es resultado del devanado de cobre en el motor eléctrico enfriado por aspiración de gas —exclusivo para los compresores de amoníaco. En esta solución no se requiere ninguna refrigeración externa. Es tan compacta que se reduce el riesgo de fugas y se elimina la necesidad de un sello de eje. Gracias al GEA CompaX, los clientes tienen todo lo que necesitan: Mínimo riesgo de fugas para una climatización segura, además de una solución que usa amoníaco para una máxima eficiencia de la planta y un entorno limpio.
GEA CompaX: el primer compresor de tornillo semihermético compacto del mundo que usa amoníaco
El compresor CompaX es la base del reciente refrigerador GEA BluQ y está rodeado de eficientes intercambiadores de calor. Una ventaja clave del nuevo refrigerador BluQ es que solo necesita 40-50 g de amoníaco por cada kW de capacidad de refrigeración, cumpliendo así las exigencias internacionales de refrigeradores con “bajo contenido de amoníaco”. Si comparamos el BluQ con sus 1,2 MW de potencia y su requisito de 60 kg de amoníaco con los refrigeradores de HFC, que pueden necesitar hasta 400 kg de refrigerante, esto representa un enorme ahorro de costes. “El nuevo compresor GEA CompaX, combinado con el refrigerador GEA BluQ, no solo establece el camino a seguir para la situación actual de cada cliente, sino que es totalmente eficiente en cuanto a reducción de emisiones de CO2, coste de propiedad, seguridad y fiabilidad”, explica Dirk Oschetzke, Director de Producto de GEA para compresores de tornillo.
El nuevo refrigerador GEA BluQ cumple al 100% con los requisitos de Eco Design 2006/2281 para refrigeradores de confort.