Huevos revueltos elaborados con proteína de huevo bioidéntica/ Onego Bio
Frederieke Reiners
Vicepresidente de New Food, GEA
Los fabricantes de alimentos e ingredientes acuden a GEA para utilizar la línea a escala piloto de la empresa para validar sus conceptos, por ejemplo en el nuevo centro de tecnología alimentaria de GEA en Hildesheim, Alemania. Una instalación similar estará a disposición de los clientes en Janesville, Wisconsin, en 2025. GEA también simula la configuración de los biorreactores con la tecnología de gemelos digitales para determinar los parámetros de producción industrial antes de construir los fermentadores. “Validar los cultivos celulares y determinar de antemano la tasa de crecimiento es crucial para el éxito de cualquier empresa que utilice la fermentación de precisión para producir proteínas alternativas”, afirma Reiners. “Nuestro servicio y experiencia ayudan a los clientes a minimizar el riesgo y el importe de su inversión. Consiguen los primeros hitos de producción sin tener que financiar sus propias plantas piloto”.
Potencial de mercado y aceptación de los consumidores A pesar de toda esta innovación, ¿cuál es la postura de los consumidores ante el tema de las alternativas al huevo? En su Informe sobre el Estado de la Industria 2023 sobre alimentos de origen vegetal, el Good Food Institute (GFI) señaló que categorías emergentes como los huevos de origen vegetal experimentaron descensos en 2023. Las ventas unitarias, sin embargo, crecieron un 25% en 2022, lo que sugiere que la inflación influyó en las menores ventas de 2023. A largo plazo, se espera que el mercado de los sustitutos del huevo alcance una tasa de crecimiento anual compuesto (TCAC) del 17,5% entre 2023 y 2033, según Future Market Insights.